PIZARRA DE HIELO

Erase una vez que un buen hombre decidió cambiar de rumbo su vida e ir en búsqueda de sus sueños...prácticamente todos los días lo decidía y todos los días al acabar el día no quedaba nada de aquello que se había propuesto, nunca lo cumplía. El buen hombre tenía mucho que hacer, trabajaba mucho, la familia, los niños, su amigos, "realmente se le pasaba el día  y nunca tenía tiempo para iniciar su 'nuevo rumbo'". Así que al día siguiente volvía a proponerse y a comprometerse para iniciar de nuevo la búsqueda.

Su sueño era partir hacia una tierra lejana, heredada de sus antepasados, donde podría tener una casa mas acogedora, con unas tierras fértiles y pastos generosos para su ganado. El camino hasta esa tierra era largo y difícil. El no tenía prisa, ahora tenía una casa, que no era cómoda, tenía trabajo...donde trabajaba de sol a sol por dos candiles, tenía su familia, a la que realmente casi no veía ni disfrutaba...El sabía que no vivía...sino que "sobrevivía". Eso si tenía un sueño y todos los días se proponía ponerle "patas" y hacerlo realidad.

Lo sabía todo, como llegar, las rutas, los contratiempos posibles, como labrar la tierra, como construir un molino...había leído y estudiado todo lo necesario para que la vida en su nueva casa fuera idílica.

Así que un día harto de no cumplir sus auto-compromisos, decidió esculpir su sueño en un bloque de hielo, a modo de pizarra, escribiendo punto por punto lo que haría para cumplirlo, como recordatorio de su promesa.

El invierno pasó y el bloque de hielo se fue derritiendo sin que el "tuviera tiempo" de ponerse manos a la obra. La comodidad, la incertidumbre, los miedos del camino y sus boicots constantes fueron el sol que derretía su confianza y sus buenas intenciones. Y es entonces cuando este buen hombre echaba la culpa al Sol de todos sus males y su triste vida...y seguía sin hacer nada, seguía vacío.

Año tras año volvía a esculpir sus grandes objetivos, eso si cada año los grababa más bonitos y con adornos....pero el Sol, ese "maldito" Sol se lo derretía en primavera...entonces llegaba el tiempo donde había que dedicarse a la siembra, riego y luego la cosecha...no tenía tiempo de pensar en sus sueños. La vida, la mala vida y el Sol no le permitían cumplir sus sueños "Maldita sea, que mala suerte tengo!!!!!!".

Y pasaron los años y este buen hombre se hizo mayor lamentándose de no haber pasado a la acción, cuando lo tenía todo en su mano para ser feliz....

Su historia fue escrita en una PIZARRA DE HIELO.

David Espinosa 06/07/2012




Compromisos adquiridos con otras personas o con nosotros mismos. Promesas, objetivos, planes de acción....y cuantas veces se quedan en eso, en buenas intenciones escritas en una pizarra de hielo en medio de la Plaza de España de Sevilla en Agosto.

Cuando no cumplimos con lo que nos comprometemos es como si nos clavasemos una estaca en el centro de nuestra confianza y al fin y al cabo de nuestro SER. El Ego se hincha y busca sus razones por las que no hemos cumplido. Hace salir el Sol para que derrita esa promesa y no pase nada.

Que pasa con nuestra acción??? Parece ser que nos boicoteamos constantemente...es como si de repente hacemos caer un bote de pegamento y nos ponemos encima para no tener que movernos y tener la excusa perfecta para no hacerlo.

Quieres escribir tu historia en un bloque de hielo o en una gran piedra de granito que perdure para siempre???? Tu lo tienes todo para cumplir tus objetivos y tu eliges como quieres vivir tu vida...no eches la culpa al Sol, ni al hielo, ni a lo mucho que trabajas....solo TU eres responsable de SERTUSER.